Los pueblos tienen una belleza
interior y otra exterior , esta se puede apreciar a simple vista, pero la interior
es el día a día en el , ver cómo se comportan la gentes, las cosas que les gusta
y las costumbres que tienen. Todo esto lleva tiempo conocerlo porque hay que
ver en diferentes épocas del año y lo
que se hace en dichos pueblos por que esto no se aprecia de un vistazo.
Un pueblo en el que no se puede
volver a apreciar su interior es Jánovas es un pequeño pueblo de Huesca,
abandonado, para mi uno de los lugares
que más me sorprendió por su historia . Jánovas es desalojado y sus tierras
expropiadas para construir un pantano , el cual nunca se construyó, pasaron muchos años desde que esto ocurrió, por lo cual está en ruinas. Pero cuando yo estuve los
vecinos que vivieron allí y que ahora residen en la ciudad fueron a celebrar
una fiesta en recuerdo a su pueblo y realizar un reencuentro de vecinos, todavía se podía
ver banderines de decoración en una especie de plaza o explanada, zona donde se
celebró el baile típico.
Hace unos meses fue publicada en todos en los telediarios que después de muchos años el gobierno
va a devolver las tierras a sus dueños puesto que no se construyó el pantano
que se había proyectado.
De hecho cerca del pueblo se ven tuberías
sin colocar que han quedado a la orilla del rio. Este pueblo tiene un bonito
puente de madera y pasear por sus calles llenas de plantas , al igual que las
casas de piedra medio derruidas, deja entrever la clase de vecinos que lo
habitaban, casas más humildes y otras más señoriales, todavía que parte del
colegio.
Si alguna vez tienes ocasión, visítalo
te gustará.
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